Cuando se trata de lesiones físicas o problemas articulares o musculares, las afecciones del tendón de Aquiles son muy sonadas entre otras posibles contusiones y roturas. Mucha gente sabe de su existencia o ha oído hablar alguna vez al respecto, pero es cierto que no todo el mundo conoce su sintomatología, sus causas o, incluso, las posibilidades de prevención y de tratamiento del tendón de Aquiles.
En este post te traemos la guía definitiva con todo lo que se necesita saber sobre el tendón de Aquiles: qué es, por qué se dan sus afecciones, qué personas pueden ser más propensas a ello, cómo se manifiesta, cómo se puede prevenir y cómo se debe tratar.
Se trata del tipo de daños o dolencias del tendón de Aquiles con las que se suele acudir a un fisioterapeuta, como ocurre en nuestra Clínica de Fisioterapia Deportiva de Madrid en Chamartín. Pero, la gran pregunta es: ¿se debe ir al fisio para intentar paliar la sintomatología del tendón de Aquiles?
¿De qué hablamos?
¿Qué es el tendón de Aquiles?
El tendón de Aquiles es aquel que conecta e talón con el grupo muscular posterior de la pierna ubicado en a pantorrilla. Se trata del tendón más fuerte del cuerpo, puesto que el tendón de Aquiles soporta todo el peso corporal y, además, es el encargado de permitir que podamos realizar acciones básicos como caminar, correr y saltar.
Pero, precisamente por tener que soportar ciertos movimientos, tensiones y el peso de todo el cuerpo, la importancia que tiene el tendón de Aquiles en nuestro aparato locomotor provoca que se someta a la posibilidad de sufrir patologías y lesiones comunes en el tendón de Aquiles, especialmente entre ciertos grupos de la población que pueden ser más propensos a ello.
Tipos de lesiones y afecciones del tendón de Aquiles
Tendinitis de Aquiles
La tendinitis de Aquiles no es más que una inflamación del tendón de Aquiles provocada por la actividad diaria y la frecuente resistencia a la que se somete este tendón. Al ser una parte tan importante y rendida de nuestro aparato locomotor, es común que el tendón de Aquiles se inflame y se genere así una tendinitis o tendinosis.
Bursitis de Aquiles
En este caso, la bursitis del tendón de Aquiles es la inflamación concretamente de las estructuras que componen la articulación del tendón de Aquiles. Es decir, se trata de una hinchazón en las bursas de este tendón, que son las bolsas sinoviales del propio tendón de Aquiles. La aparición de bursitis en el tendón de Aquiles viene provocada igualmente por la actividad diaria a la que se somete, mismamente por la simple presión que puede hacer el calzado en nuestro pie, concretamente en esa zona del talón donde se encuentra el tendón de Aquiles.
Rotura del tendón de Aquiles
La rotura del tendón de Aquiles se produce en concreto sobre las fibras que lo forman. Pueden darse hasta tres grados de rotura en función a si la fractura de las fibras del tendón de Aquiles ha sido imperceptible, parcial o total. Por supuesto, esto supondrá un problema a la hora de caminar y de realizar ciertas actividades físicas.
Síntomas y causas del tendón de Aquiles
Hay ciertos factores de riesgo de padecer ciertas lesiones o afecciones del tendón de Aquiles que dependerán de cada persona:
- El sexo determina que ciertas personas puedan sufrir este tipo de patologías del tendón de Aquiles con más frecuencia, puesto que los hombres tienden más a padecerlas.
- La edad también influye puesto que, con el envejecimiento, el tendón de Aquiles tiene más posibilidades de padecer lesiones después de haberse sometido a grandes esfuerzos a lo largo de los años.
- Otros factores que aumentan el riesgo de tener problemas en el tendón de Aquiles son las patologías o afecciones previas que se padezcan, como una presión arterial alta o problemas físicos como lo que se conoce como pies planos o la obesidad.
- También es habitual que las afecciones del tendón de Aquiles aumenten sus posibles riesgos en caso de malas prácticas en los hábitos deportivos: utilizar calzado desgastado para correr y/o correr por terrenos irregulares y escarpados; una actividad deportiva muy intensa; salir a hacer deporte al aire libre cuando la climatología sea demasiado fría, puesto que el tendón de Aquiles duele más con el fío; recibir algún golpe o traumatismo causado o no por el deporte; etc.
En cualquier caso, las afecciones del tendón de Aquiles siempre se suelen manifestar en forma de molestias o dolor en la zona. Visualmente, además, esa zona trasera del talón y hacia el gemelo en la que se encuentra el tendón de Aquiles se verá enrojecida e hinchada por lo general.
Claro está, la sintomatología será mayor o menor en función al grado de lesión que se padezca en el tendón de Aquiles. Además, a primera hora del día y después de haber realizado alguna actividad física esas molestias o el aspecto dañado del tendón se agravarán: es normal que, después de muchas horas sin mover el pie como ocurre por las mañas al despertar, el tendón esté más rígido y se sienta más dolor; por el contrario, si se realiza deporte y esfuerzos físicos el tendón estará más trabajado pero, igualmente, esto hará que los síntomas de una posible lesión en el tendón de Aquiles empeoren.
Por otro lado, es también habitual que, de padecer una afección propia del tendón de Aquiles, se presente tal rigidez en la zona posterior del talón y la pantorrilla que incluso suene como si la zona crujiese al apretar el tendón o al mover el tobillo. Por ello, esto sumado al dolor y las diferentes molestias que provoca, las lesiones en el tendón de Aquiles impiden que se pueda caminar correctamente o, en algunas ocasiones, incluso plantar o mover el pie.
Prevención y tratamientos del tendón de Aquiles
Dada la intensidad y los riesgos a los que se somete diariamente el tendón de Aquiles, es importante llevar a cabo una serie de rutinas y acciones que nos ayudarán a hacer frente a posibles lesiones o afecciones en el tendón de Aquiles:
- Si eres deportista y quieres aumentar la intensidad de tu ejercicio o actividad física, deberás hacerlo de forma gradual. No es recomendable que, durante una sesión de entrenamiento, se comience desde el principio con una intensidad muy alta. Para ello, será importante comenzar por el calentamiento y estiramientos que eviten posibles lesiones posteriores producidas por el entrenamiento (ya no solo para prevenir afecciones en el tendón de Aquiles, sino para evitar lesiones en cualquier parte del cuerpo mientras hacemos ejercicio).
- Fortalece tu musculatura, en este caso, especialmente de la zona posterior de la pierna para prevenir afecciones en el tendón de Aquiles. Todo músculo fortalecido ganará fuerza también para combatir posibles lesiones y reducir su riesgo de padecerlas.
- El tipo de calzado que se utilice habitualmente, sobre todo refiriéndonos al calzado que se emplee para actividades físicas intensas como el deporte, debe ser adecuado y favorable para evitar que el tendón de Aquiles se lesione por el uso de un calzado desgastado, inapropiado o que no amortigüe bien los impactos con las diferentes superficies.
Pero, como ya hemos visto, en ocasiones hay otros factores que nos impiden evitar al 100% que padezcamos una afección en el tendón de Aquiles. En ese caso, las posibilidades de tratamiento de las lesiones en el tendón de Aquiles son variadas en función también al grado de importancia física que esa afección del tendón pueda tener.
En primer lugar, una rotura profunda y total del tendón de Aquiles tiene la solución precisa de someterse a intervención quirúrgica. Todo dependerá de cada situación y de cada persona, pero tu médico o traumatólogo sabrá determinar si el grado de rotura del tendón de Aquiles que padeces requiere una operación o si puede tratarse de otro modo.
En caso de ser una afección del tendón de Aquiles menos rotunda, lo más habitual es llevar a cabo un tratamiento constante y cuidadoso sobre la zona lesionada. Y aquí entra la importancia de la actividad y el trabajo de los fisioterapias deportivos.
Llevar una vida sana y no sedentaria en lo que a actividad física se refiere, pero siempre atendiendo a los cuidados y precauciones necesarias para evitar precisamente posibles lesiones, será un factor muy importante para tratar las afecciones del tendón de Aquiles de igual modo que para poder prevenirlas. Efectivamente, si fortalecemos nuestros músculos de la pantorrilla a través de ejercicios de fisioterapia y estiramientos, nuestra recuperación muscular de la zona del tendón de Aquiles se verá favorecida.
Además, para reducir los síntomas de las lesiones del tendón de Aquiles es muy recurrido implementar acciones como la ingesta de antiinflamatorios cuando se necesiten (siempre recetados por un profesional de la salud), mantener reposo y no someter nuestro tendón a grandes esfuerzos (para lo que puede ser factible el uso de muletas o mantener el pie en alto para reducir la inflamación), o también vendar y poner frío sobre la zona afectada del pie.
Estos mencionados son los típicos remedios más habituales para las lesiones o tendinitis en el tendón de Aquiles. Pero, si de verdad se pretende solucionar el problema de la forma más favorable y efectiva para mejorar la salud física de tu tendón de Aquiles, será necesario que acudas a un fisioterapeuta especialista que sepa valorar tu situación y recomendarte las mejores prácticas para tu caso, así como trabajar tu tendón de Aquiles con tratamientos fisioterapéuticos.
Mejor clínica de fisioterapia para tratar lesiones del tendón de Aquiles
Fisiosalud+ Chamartin es tu clínica de fisioterapia para el tendón de Aquiles especialista en todo tipo de patologías y lesiones provocadas por la actividad física, sean del tipo y el grado que sean. Por supuesto, entre las especialidades de nuestros fisioterapeutas profesionales se encuentran las posibles afecciones sobre el tendón de Aquiles.
Nos encargamos tanto de prevenir lesiones en el tendón de Aquiles como de tratar aquellas afecciones que ya se padezcan. Nuestros tratamientos fisioterapéuticos personalizados se adaptan a la situación de cualquier persona que padezca una lesión en el tendón de Aquiles o que quiera reducir el riesgo de padecerla. Sea cual sea tu objetivo, nos adaptamos a ti.
La fidelidad de nuestros clientes avala la calidad y garantía de nuestros servicios y tratamientos. Fisiosalud+ Chamartín cuenta con los mejores fisioterapeutas deportivos, quienes además trabajan como fisioterapeutas oficiales de la Federación Madrileña de Pádel desde 2014.
Si tienes dudas sobre tus posibles afecciones o sintomatología en el tendón de Aquiles, o necesitas realizar cualquier otra consulta, estamos a tu disposición en nuestra clínica de fisioterapia deportiva Fisioterapia deportiva en Madrid.